Gracias Elvia.

Gracias Elvia.

Hoy Elvia Villezcas, o como te decimos de cariño, Chita. Formalmente concluyes tu puesto, pero no tu papel de madre fundadora,  en esta asociación que construiste con tu amiga, cómplice y hermana del alma Linabel.

Así como tú formaste las raíces de esta organización, Las Hormigas; hoy queremos que coloques este árbol en esta tierra desértica que a lo largo de 22 años  (Porque en el 2000 que empezó la primera etapa), esta tierra que a lo largo de 22 años has ido abonando para convertirla en tierra fértil,  y que este equipo de trabajo se compromete continuar abonando para que crezca y dé fruto a la comunidad de Anapra.

Este árbol representa lo que dejas en nuestras manos, vida. Hoy depositas aquí la vida de un árbol en representación de la confianza que depositas en tus compañeros, tu familia laboral, tú depositas en este equipo la confianza de la vida de Las Hormigas para que como este árbol, siga creciendo, acoja y acompañe a la comunidad, a las familias para las que has trabajado y continuara trabajando Las Hormigas.